Contra la violencia machista, educación en igualdad: el antídoto. Todos, representantes municipales y vecinos de Cieza, se unieron este miércoles por la tarde para una importante causa, mostrar públicamente su repulsa contra esta lacra social que es la violencia de género y expresar la necesidad de progresar como sociedad.
La Esquina del Convento certificó ayer, de nuevo, la presencia masiva de ciudadanos en un acto público organizado por la Concejalía de Mujer e Igualdad del Ayuntamiento de Cieza para sensibilizar a la población contra esta lacra social que es la violencia de género y para homenajear a todas las mujeres que son víctimas de cualquiera de las formas de violencia de género, sobre todo a aquellas que han perdido la vida por esta causa.
Antes, en la plaza de San Juan Bosco, se inició una marcha contra la violencia machista que discurrió hasta el centro de la ciudad como homenaje a las víctimas mortales de esta pandemia. A su llegada a la Esquina del Convento, se realizó la lectura del manifiesto institucional de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia contra la violencia de género y se encendieron velas en homenaje a todas las víctimas. El acto estuvo tejido musicalmente por las interpretaciones del Quinteto de Laúdes Manuel López Villalba, cuyos componentes estuvieron acompañados por la cantante Celia Aroca.
Pese a que los datos siguen dibujando una realidad teñida de negro son 48 las mujeres asesinadas este año-, lo que aconseja seguir insistiendo en políticas de prevención y protección a las víctimas, el manifiesto leído por el alcalde de Cieza, Pascual Lucas, lanzó dos mensajes: uno de esperanza para las mujeres maltratadas, porque de la violencia machista se puede salir; y otro de mayor compromiso para la sociedad, porque entre todos se puede acabar con esta lacra y progresar como sociedad.
El manifiesto fraguó su mensaje en torno a la esperanza de acabar con la violencia: "Es la máxima expresión de la desigualdad entre hombres y mujeres y la peor de las humillaciones; acabar con ella es nuestro deber y compromiso. Es un reto realista y esperanzador. Por ello, no sólo debemos señalar en nuestro calendario esta fecha como el único día del año en el que condenamos la violencia contra la mujer".
Una reivindicación muy significativa se hizo a los asistentes: "Los niños que han presenciado o sufrido violencia basada en el género tienen más probabilidades de convertirse en víctimas o maltratadores cuando sean adultos. Por ello, reivindicamos la necesidad de la educación en igualdad, desde los niveles más básicos, para trabajar la prevención de la violencia de género y el desarrollo de conductas que eviten futuras actitudes violentas entre hombres y mujeres".
El texto institucional leído por el regidor pedía implicación frente a esta lacra. "Todos y todas, tenemos la obligación de no permanecer en silencio, ni mirar hacia otro lado ante tal tremendo acto de injusticia", dijo Lucas, porque "todos los días debemos denunciar la violencia para contribuir a la construcción de una sociedad más justa, solidaria e igualitaria".
También se reclamó a la ciudadanía en general que abandere la causa. "Por todo esto, manifestamos la necesidad de la implicación de toda la ciudadanía: gobierno, instituciones públicas y privadas, movimiento asociativo (no sólo de mujeres, sino cualquier ámbito y colectivo), Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Administraciones Locales, etcétera".
Cabe recordar que esa misma mañana hubo otro acto institucional en el colegio Jaime Balmes presidido por la concejala de Mujer e Igualdad, Cristina García-Vaso, con lectura del manifiesto institucional contra la violencia de género, entrega al centro del protocolo de actuación en casos de violencia de género en el ámbito educativo, reparto de 'violentómetros', minuto de silencio por las mujeres fallecidas por violencia de género y suelta de globos morados y lazo humano.
