Ecologistas en Acción-Región Murciana ha celebrado este año el Big Jump en aguas del río Segura a su paso por Cieza. El año pasado el lugar elegido fue la playa fluvial de Calasparra, también en el Segura.
El "Big Jump" es una iniciativa de la European Rivers Network, ERN, secundada por distintas organizaciones europeas. La organización ecologista recuerda que "la Unión Europea ha fijado el año 2015 como la fecha en la que debe haberse recuperado el buen estado ecológico de los ríos europeos. Esto es, para entonces, el baño en las aguas de nuestro ríos debe ser una realidad."
En esta ocasión el "Gran Salto" tuvo lugar el pasado domingo 11 de Julio a las 12 horas. Y el lugar elegido fue el Paraje de "el Canadillo", en la margen izquierda del río Segura, a su paso por Cieza.
Pedro Luengo, coordinador de la organización ecologista en Murcia, ha explicado que "el Big Jump es una actividad lúdico-festiva que consiste en bañarse en todos los ríos de Europa y además para no perder la costumbre, en esta ocasión hemos aprovechado para recuperar un trocito de ribera en el paraje del Canadillo".
Una actividad que este año ha estado organizada por el Proyecto Nutria de Ecologistas en Acción-Región Murciana. Un proyecto que -explica Luengo- "tiene como principal objetivo la conservación y recuperación de las zonas fluviales y su diversidad, a través de la participación de voluntarios".
Una de las principales amenazas del Segura en la Vega Alta: la reducción de caudales.
Otro de los motivos por los que Ecologistas en Acción-Región Murciana ha elegido este año Cieza para este “chapuzón” reinvidicativo es el proyecto que desde la Confederación Hidrográfica del Segura -dependiente del Ministerio de Medio Ambiente- se ha presentado y que afectará a toda la Vega Alta: el entubamiento de caudales desde el Cenajo hasta las potabilizadoras del Taibilla.
Antonio Cobarro, portavoz de Ecologistas en Acción en Cieza, ha señalado que si se lleva a término "tendrá un elevado impacto ambiental sobre el río Segura en la comarca de la Vega Alta, ya que entre el Cenajo y el Azud de Ojós los caudales circulantes por el Segura podrían disminuir en más de un 40%" .Algo que -añade- "resulta a día de hoy incompatible con la conservación del buen estado ecológico de nuestro río".