En su habitual comunicación a los medios para valorar los resultados del Pleno ordinario, correspondiente esta vez al mes de abril de 2014, el concejal de IU-Verdes José Eduardo Illueca ha hecho especial hincapié en dos de los puntos acordados a propuesta del equipo de gobierno, "la reversión de los terrenos junto a la depuradora cedidos a la Comunidad Autónoma para la instalación de una central de biomasa y la modificación del Plan General para permitir ocho alturas en la manzana frente al Hospital Lorenzo Guirao".

En opinión de Illueca, la reversión definitiva del dominio de los terrenos cedidos a la Comunidad Autónoma "es una muestra más de la política de venta de humo del Partido Popular, y es desde luego una noticia lamentable, aunque esperada". En las últimas semanas, desde la formación ecosocialista se había insistido en la falta de explicaciones desde el gobierno municipal en relación con la situación del proyecto, "si bien era de dominio público que la inversora francesa se había retirado".

El voto favorable, según Illueca, "era forzado porque llegado a este punto es obligada la reversión del dominio de uso al Ayuntamiento, pero en ningún momento puede entenderse como una aquiescencia con la gestión realizada: los 300 puestos directos y más de 1000 indirectos prometidos se han volatilizado, y la Comunidad Autónoma ha dado muestra, una vez más, del desamparo en que mantiene al municipio de Cieza".

En cuanto al otro punto destacado, el concejal ecosocialista destacaba "que votamos en contra por coherencia con nuestra posición mantenida hace ya casi un año, con ocasión de la aprobación provisional de la modificación del Plan". Entonces, "ya señalamos que no podíamos ver el interés general en una propuesta que recoge puntualmente una propuesta de los promotores, sin negociación o cortapisa alguna, que lleva al máximo permitido por el Plan la altura de los bloques en esta manzana y que convierte a la urbanización de esta zona en una absoluta excepción, desde este punto de vista, en el contexto del Plan General".

Para Illueca, "se sienta innecesariamente un precedente, cuando el urbanismo actual tiende, en todos los lugares, a moderar la construcción en altura, y en un contexto urbanístico donde la norma son de 3 a 5 alturas, nos vamos a 8 sin mayor explicación, aprovechando que se cede el espacio interior de la manzana (antes privado) al dominio público, lo que permite mantener los volúmenes edificables".