Cada vez son más los vecinos que se quejan de las máquinas sopladoras-barredoras que se usan en el servicio de limpieza viaria de nuestra ciudad, tanto por el elevado nivel de ruido que producen cuanto por la generación de nubes de polvo en suspensión que permanecen un buen rato tras su paso.

En palabras de María Jesús Fernández, portavoz del círculo de Podemos-Cieza, "el polvo levantado por estas máquinas contiene gran número de partículas en suspensión, PM, que permanecen en el aire durante largos periodos de tiempo y que pueden penetrar hasta la zona bronquial, acumulándose en los alveolos, ya que su expulsión mediante mecanismos fisiológicos es prácticamente imposible". Esta situación, a la larga, conlleva importantes efectos sobre la salud de las personas expuestas, con mayor incidencia de asmas, de cáncer y de enfermedades cardiovasculares. Un reciente estudio publicado en Journal Environmental Research concluyó que un 20% de las muertes prematuras mundiales están asociados a la exposición a partículas en suspensión.

En opinión de Podemos-Cieza, sistemas de limpieza urbanos como los que utilizan el Ayuntamiento de Cieza, basados en sopladores, "levantan del suelo las partículas ya sedimentadas y por tanto inofensivas que vuelven a entrar en circulación en la atmósfera, exponiéndonos nuevamente a ellas". La crítica a estas tecnologías de limpieza viaria "está avalada por evidencias científicas muy consistentes". Por ejemplo, "una investigación desarrollada por la Universidad Politécnica de Cartagena ha establecido que las máquinas barredoras sopladoras que limpian a diario las calles aumentan entre un 60 y un 70% el nivel de partículas en suspensión contaminantes y arrastran restos fecales animales, compuestos cancerígenos y polen".

Los científicos autores del estudio, con el profesor José María Moreno Grau a la cabeza, concluyen que del empleo de estas máquinas se deriva un importante peligro para la salud, y consideran "una insensatez levantar el polvo del suelo, que debería aspirarse directamente". En este estudio se advierte de que, además, las máquinas generan "una alta contaminación acústica, y también por gases debido a la quema de su combustible".

La Constitución española reconoce, en su art. 45 CE el derecho de todos "a disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona", así como la obligación de los poderes públicos de protegerlo, "en especial del poder local, al que la Ley de Bases reconoce como competencia propia la protección del medio ambiente y de la salubridad".

Por último, hay que tener en cuenta que en un contexto donde nos vemos forzados a respirar un aire cada vez más contaminado, "no es razonable que incrementemos de forma consciente esta contaminación con el uso de sistemas de limpieza viaria erróneos y cuestionados por la comunidad científica".

Por todo ello, desde Podemos-Cieza han solicitado por escrito al Ayuntamiento "la sustitución de las máquinas barredoras y sopladoras usadas para la limpieza viaria de las calles de Cieza, causantes de una acreditada contaminación acústica y atmosférica, por otros sistemas alternativos", al tiempo que se han dirigido al Defensor del Pueblo para pedir su intervención en este tema.