En mi calidad de concejala de Discapacidad, quiero dirigirme a todas las asociaciones de personas con discapacidad, a sus miembros y familiares y a la ciudadanía en general, con el fin de matizar/aclarar mi intervención realizada en el reciente pleno municipal.
Con mis declaraciones, nunca fue mi intención el menospreciar la actividad que realizan todas ellas, siendo consciente de que son imprescindibles gracias a su compromiso y dedicación, llegando con su trabajo a cubrir el espacio que los organismos públicos no conseguimos cubrir en algunas ocasiones y, por tanto, son fundamentales para construir una sociedad más inclusiva y justa.
En cualquier caso, es obvio que no supe explicarme y di pie a una mala interpretación de mis palabras, ya que mi intención no era otra que manifestar mi frustración por la negativa que algunas de las asociaciones presentes en la "Mesa de la Discapacidad" a celebrar el Día de la Discapacidad, aduciendo como único motivo, que es de todos conocido, quelas asociaciones no han recibido las ayudas que cada año les hacen llegar desde el Ayuntamiento.
Lamento profundamente si mis comentarios causaron malestar, por lo que pido disculpas sinceramente a todos aquellos que se han podido sentir ofendidos, reiterando mi compromiso firme de trabajar de la mano con todas las asociaciones y personas implicadas para defender sus derechos y avanzar en las políticas que mejoren su calidad de vida.
Mi empatía no es impostada y, para mi desgracia, yo misma tengo una discapacidad que me impide llevar a cabo mi vida con normalidad, por lo tanto, sé de primera mano las dificultades encontradas en diferentes ámbitos de la vida.
Reitero mis disculpas y, sobre todo, mi disposición para dialogar, trabajar con generosidad y por supuesto, fortalecer la relación entre este Ayuntamiento y las asociaciones que representan los intereses de las personas con discapacidad.