"Situación de estabilidad presupuestaria al cierre de 2024. Esto es importantísimo porque genera confianza en aquellas personas que tienen que contratar con el Ayuntamiento de Cieza y nos permite acometer proyectos en el año 2025. Por tanto, no va ser necesario un plan de ajuste económico, lo que desmonta los augurios catastrofistas del PSOE, que decía que el Consistorio iba a acabar el años con desequilibrio económico. Las cuentas públicas están saneadas". Así lo aseguró este lunes la portavoz del Gobierno municipal, María Turpín, en el balance del pleno extraordinario de ayer y de la gestión municipal durante el ejercicio 2024.

Respecto al pleno extraordinario, el equipo de gobierno abordó el pago de veinticuatro facturas pendientes por valor de 85.000 euros, "algunas desde la Navidad de 2022 o del Flor Festival de 2023. Este avance permite que las empresas locales recuperen la confianza en trabajar con el Ayuntamiento de Cieza. Destacamos el compromiso del equipo de gobierno, tal y como ha remarcado la concejal de Hacienda, por gestionar de manera transparente y eficiente, evitando prácticas como las contrataciones verbales y sin contrato".

En este sentido, la portavoz municipal hizo alusión a las facturas pendiente de pago con la Banda Municipal de Música de Cieza, "a la que no se le había pagado desde el año 2022 en adelante y a la que se le adeudaban diez facturas por un valor de 2.500 euros cada una de ellas".

Por otra parte, Turpín se refirió a la gestión municipal de 2024 que, en palabras suyas, "ha sido un año difícil y hemos asistido a casos que no se habían dado en estos cuarenta años de democracia. Y como todo en la vida ha tenido sus luces y sus sombras", en referencia al bloqueo originado tras la ruptura del acuerdo de gobierno entre PP y Vox producido el pasado mes de marzo.

En su intervención informó de la renuncia del equipo de gobierno a emplear la subvención de casi 1,2 millones de euros procedente de fondos europeos que iba a remodelar las comisaría de la Policía Local en un centro social para los vecinos de San José Obrero, lo que hubiera conllevado el traslado de los agentes al edificio de la antigua lonja municipal.

Y es que, según la responsable municipal,"no se ha podido emplear los alrededor de 500.000 euros que precisa el edificio de la lonja para adaptarlo a las necesidades de los agentes, ya que la oposición ha votado en contra hasta en tres ocasiones de la modificación de créditos que hubiese hecho posible el proyecto".